¡Vuelve el Madrid! Miradas puestas en el Camp Nou


Tras el parón de selecciones regresa a las competiciones el Real Madrid, y lo hará este mismo fin de semana en el Santiago Bernabéu frente al Real Valladolid, partido que se antoja como un mero trámite a lo que puede ser uno de los platos fuertes de la temporada en la parroquia merengue: el clásico de vuelta en las semis de Copa del Rey.

Es indudable que la mente estará puesta en el Bernabéu, pues el Madrid no tiene que hacer otra cosa que no sea sumar de a tres en todo lo que resta de temporada, pero el corazón no puede estar en otro sitio que no sea en el Camp Nou, donde el miércoles se disputará la vuelta de las semifinales de copa, en las que los blancos están obligados a ganar para, al menos forzar la prórroga y buscar el pase a la gran final del próximo 6 de mayo en el estadio de La Cartuja.

Centrándonos en el partido más próximo, el domingo el Real Madrid se verá las caras contra el Valladolid, que buscará conseguir lo que no ha logrado nunca: una victoria en el estadio blanco. En principio parece un partido asequible para los locales, que a pesar de no llegar en una dinámica excepcional y seguramente optar por realizar varias rotaciones son altamente superiores al conjunto rival, aunque está liga ya nos ha demostrado que cualquiera puede dar la sorpresa. En el conjunto blanquivioleta las sensaciones son algo dispares, pues sus últimos resultados y las sensaciones transmitidas en algunos partidos quizás no invitan a ser optimistas, pero la clasificación y el bagaje de sus jugadores y entrenador hacen que esa luz de esperanza brille entre todos los que rodean al club. El guión del partido parece bastante claro, y tendrá como protagonista al Real Madrid, que será el que lleve la batuta del juego y posea la mayoría de ocasiones de peligro, mientras que el Real Valladolid tratará de elaborar su juego y exprimir al máximo sus ocasiones, con tal de buscar poner en aprietos a los locales y conseguir sumar puntos, ya sea de a uno o de a tres.

Tres días después de este enfrentamiento y sin mucho tiempo para descansar ni modificar esquemas, al Real Madrid le tocará viajar hasta la Ciudad Condal para intentar darle la vuelta a la semifinal y birlarle la plaza finalista al Fútbol Club Barcelona. Está claro que no será una tarea ni mucho menos fácil, pues últimamente le está costando horrores hacerle frente al Barça y más cuando se trata de un partido tan importante en su campo. No obstante, si por algo es reconocido este club es por dar la cara en las grandes citas, por envalentonarse cuando se requiere de un plus para realizar algo admirable, y por saber competir y sobre todo, ganar. Dicho esto, el Real Madrid tiene que tomarse el enfrentamiento como un partido más, en el que necesita ganar y solo le vale eso, ganar.

Creo que no es ninguna mentira cuando se dice que este partido puede ser un punto de inflexión crucial para el devenir de toda la temporada, pues una victoria en el Camp Nou y la respectiva clasificación a la final de la Copa del Rey levantaría los ánimos en la plantilla y en la afición a unos niveles insospechados y haría ver el final de temporada con una mejor cara y actitud, además de otorgar al club otra posibilidad de poder luchar por un título nacional. En cambio, una derrota o la no clasificación en Barcelona dejaría algo tocada a la plantilla, que vería cómo se escapan dos posibilidades de título en menos de un mes y tendría que enfocarse única y exclusivamente en la Champions League, además de empeorar el clima entre los aficionados, cuyos ánimos no son del todo buenos y este varapalo los empeoraría aún más.

Parafraseando al entrenador del rival capitalino: hay que ir partido a partido, pero aunque está premisa está clara, en el Real Madrid siempre se trata de apuntar cada vez más y más alto, y no entender la importancia que se le ha de otorgar a cada encuentro no es propio del conjunto merengue. Al fin y al cabo se trata del Real Madrid, el club más laureado de la historia, por lo que la ambición y la exigencia son dos palabras que lo definen a las mil maravillas.