El dilema de la Liga: ¿centrarse en Champions o ir a por todas?


En la mente de todo madridista cohabitan dos opciones, con sus pros y sus contras, pues la tentación de dejar la liga en un plano más secundario y centrarse por completo en conseguir levantar la quinceava orejona es muy apetecible, pero el gen competitivo y de resiliencia que posee el Madrid es tan inmenso que la opción de pelear por absolutamente todo hasta que las matemáticas digan lo contrario es muy seductora.

El Real Madrid venía atravesando una brecha de tres partidos sin conseguir la victoria, una dinámica cambiada tras hacerse con los tres puntos ante los pericos. Con la alarmante baja de Karim Benzema y las ya anteriores de Ferland Mendy y David Alaba, el Real Madrid buscará seguir sumando de tres en tres puntos y afrontar el choque de vuelta contra el Liverpool por los octavos de final de la Champions League con buenas sensaciones y confianzas.

Teniendo en cuenta toda la situación, vamos con la tesitura que está rondando por la parroquia merengue. Estas últimas semanas han ratificado la buena forma en la que se encuentra el Barça en liga y, a la vez, la irregularidad que ha aparecido en el club blanco, dejando un margen entre estos dos de nueve puntos. El calendario se va comprimiendo cada vez más, la forma física de los jugadores va minándose a medida que avanza la temporada y las opciones de ciertos títulos se antojan cada vez más complejas, por lo que hay ocasiones en las que es necesario elegir y poner toda la carne en el asador por una única competición, cosa que esta última década no le ha funcionado nada mal al Real Madrid.

Como se ha comentado, el nivel de juego y efectividad sumado a la comparación de calendarios, dejan al Barça muy bien parado de cara a lo que queda de liga, así que muchos madridistas abogan por dejar a un lado la pelea por el título (siempre y cuando esto signifique una focalización total en la Champions). Sin embargo, no hay ni mucho menos mayoría absoluta, pues existe gran parte del madridismo que no da por perdida esta liga, y defiende a capa y espada continuar con la pelea por el campeonato nacional, sin dejar de lado las demás competiciones, confiando en que se dispone de una plantilla extremadamente cualificada para lograrlo y que la brecha entre Barça y Madrid se puede recortar en cualquier momento.

Dicho esto, se dice que nunca existen solo blancos y negros, sino que también hay una gran cantidad de grises, y a estas tonalidades son a las que se deben agarrar los aficionados blancos,  puesto que en el fútbol no hace falta tomar una decisión irreversible que luego resulte ser errónea o prematura, ya que algunas de las mejores cosas que nos brinda el deporte rey son la improvisación, la imprevisión y la inexorabilidad. Por esto, el Real Madrid deberá evaluar su situación y todas las posibilidades, creando así escenarios hipotéticos y preparándose para todo lo que pueda pasar, pues nunca se sabe si el Barcelona descenderá su nivel, si la Champions se volverá extremadamente complicada o miles de posibilidades más.

En definitiva, la conclusión final es que queda todavía una larga travesía para finalizar la temporada y las espadas están por todo lo alto, por lo que tomar una decisión precipitada no sería la opción más correcta para el club. Todos sabemos que el Real Madrid es capaz de todo, pero en este tramo de temporada lo que más precisa el equipo de la capital es serenidad y usar sus armas con cabeza, así que será muy bonito ver si la plantilla, incluido el entrenador y todo el cuerpo técnico, son capaces de tomar las riendas de la situación y encauzar la temporada por el mejor de los caminos.